El bypass gástrico es un procedimiento indicado para personas que padecen obesidad morvida. Consiste en una división en dos partes del estómago, por una de ellas el alimento no pasa, permitiendo saciar más rápido el hambre. Mediante este tratamiento es posible reducir el tamaño del estómago y además disminuir la absorción calórica de los alimentos. Con esta cirugía es posible bajar un 70% del peso, ayudando a revertir los hábitos alimenticios. Para mantener en el tiempo los resultados conseguidos, es fundamental seguir una dieta equilibrada.
La intervención
El cirujano, con ayuda de un endoscopio, reduce el estomago dividiendolo en dos partes. Por una el alimento no pasa llegando directamente al intestino delgado. De esta forma se reduce la absorción calórica y de nutrientes disminuyendo así la necesidad de consumir grandes cantidades de alimentos.
La intervención
El cirujano, con ayuda de un endoscopio, reduce el estomago dividiendolo en dos partes. Por una el alimento no pasa llegando directamente al intestino delgado. De esta forma se reduce la absorción calórica y de nutrientes disminuyendo así la necesidad de consumir grandes cantidades de alimentos.
Cuidados después de la intervención
Luego de la operación, el médico dictará una dieta líquida y blanda para las primeras semanas. Durante casi 1 año, el paciente deberá seguir una dieta nutricional estricta, mejorando de esta manera los hábitos alimenticios.
Contraindicaciones
El Bypass gástrico está contraindicado en mujeres embarazadas o que estén amamantando. Tampoco se recomienda en personas con problemas de estómago, trastornos alimenticios o que padezcan problemas psicológicos o psiquiátricos.